Jacinto Salcedo
Diseñador Gráfico / Graphic Designer
Profesor de Historia del Diseño Gráfico en ProDiseño
Por Jacinto Salcedo
Los policías los humillan, los vecinos les temen y les disparan, los piedreros (consumidores de crack) los atemorizan aunque comparten la noche con ellos. Sin embargo, no hay riesgo que detenga a los grafiteros en esa fiebre casi adictiva y vandálica de rayar paredes. Hemos visto como, en los últimos años, ha habido un repunte de graffiti en la ciudad de Caracas e incluso al amparo de las alcaldías. Pero lo más interesante es como el graffiti no es ya un mero medio de dejar mensajes para los transeúntes. Hoy en día es considerado un lenguaje que ha invadido la publicidad, la televisión, el diseño gráfico y los videojuegos. Entonces, ¿son los grafiteros criminales o artistas?
La nueva generación de grafiteros no conoce a los “viejos” del oficio, ni a Grillo (Lobo), ni a Ar-epa, aquellos personajes de finales de los años 70. Si acaso recuerdan a los de los tardíos 80: Los RAA y Otra Cuestión. Y aunque recuerdan los graffiti de las bandas de rock como Sentimiento Muerto, Zapato 3 o Desorden Público, para ellos esa gente forma parte de otra movida. “El graffiti hoy en día es otro peo”, dicen.
La naturaleza críptica de los mensajes grafiteados muchas veces nos han llevado a considerarlo manchas, suciedad. Para traspasar comprensión del código visual del graffiti, nos remontamos a su origen. El graffiti es parte del hip-hop, un fenómeno social que se ubica en Nueva York en los años setenta donde la discriminación social, los guetos, las guerras de pandillas generan una serie de expresiones urbanas: el rap, el breakdance y el uso de códigos de vestimenta como la ropa holgada, bandanas y cadenas de oro. Allí se inserta el graffiti hip-hop una especie de cruzada territorial. Un diseño que demarca presencia, control y dominio de un área (muchas veces para el tráfico de drogas).
Glosario:
GRAFFITI TRADICIONAL
(hip-hop)
TAG (Tagas): firma sencilla hecha con marcadores gruesos o con spray de un solo color. También con etch bath (ácido para vidrios), con pintura de zapato o con una fresa (lima) o cualquier cosa que deje rastro…
BOMBA
(bombing como verbo)
(o THROW UP): letreros hechos con dos o pocos colores. Se hacen muy rápido por eso se les considera “bombas”.
PIEZAS: letreros grandes y complejos, de más de 3 colores. Con detalles como sombreados, bordes, brillos. Muchas veces se usan fondos de color hechos con rodillo y sobre eso se dibuja con spray.
GRAFFART
(Street art)
STENCIL: dibujos hechos con plantillas, muchas veces de cartulina, plástico o cartón.
CUTS: figuras con recortes de papel pegados con engrudo.
STICKERS: calcomanías o carteles sencillos.
ARTFAGGOT: nombre despectivo para identificar dibujos de personajes generalmente hechos con spray. También el street art está dentro de esta categoría. Para algunos éste es un caraqueñismo.
A.K.A.
(also known as): Alias (también conocido como…).
BREAKER: bailarín (de breakdance).
CREW
(también “CRU”): grupo o patota que trabajan juntos y firman con iniciales de un mensaje común (por ejemplo, CMS: Cómanse mis sobras).
DJ: pinchadiscos.
GRAFFER: grafitero.
KING: el rey del lugar, la persona que ha hecho más graffiti, o que se le debe respeto por antigüedad.
MC: cantante de hip-hop, rapero.
MOVIMIENTO
(Movida o Corriente): la comunidad de escritores de graffiti, un grupo cerrado de creación cultural con normas propias de comunicación interna. Dicen tener una «filosofía», un estilo de vida ligado a determinado tipo de música y a unas normas.
TOY: Nuevo en el asunto… o alguien con mucho tiempo que aun no tiene ni cantidad ni calidad. O alguien que dice ser grafitero aunque en realidad no se lo toma en serio.
Según el trabajo de investigación La estética del graffiti de Jesús de Diego de la Universidad de Zaragoza, España, nos da pistas claras de lo que intuíamos: “El graffiti hip-hop es un claro exponente de las nuevas estrategias creativas producidas en las ciudades del fin del siglo XX, y que muy posiblemente, estén ya condicionando el futuro de nuevas prácticas artísticas.” No en balde importantes grafiteros como Keith Haring o Basquiat (ambos neuyorkinos y ambos fallecidos) son parte del establishment artístico.
Treinta años después
A diferencia de las pintas políticas y los mensajes de protesta, que son anónimos, los graffitis como expresión urbana buscan más bien la fama, su principal mensaje es una firma autógrafa o tag. Y en esa búsqueda por adueñarse de los espacios más visibles se ha desarrollado un código de honor: no puedes pintar encima de otro, debes respetar a los que tienen tiempo pintando, debes formar un crew, tener tu nombre y crear un tag. Irrespetar esas normativas equivale a un insulto y con frecuencia se resuelven a golpes.
Entre los grafiteros o graffers hay dos grupos claramente distinguidos: los que hacen graffiti “tradicional” referidos al de origen hip-hop (tags, bombas y piezas), y los que pertenecen a la corriente “post-graffiti” o street art, a los que los primeros consideran como una “mariconada”.
Para adentrarnos al tema entrevistamos a varios grafiteros de la movida caraqueña:
– ¿Ustedes creen que su trabajo está más cerca de la ilustración, del arte, del diseño….?
45 (Manaure):
Es difícil determinarlo, pero creo que está más cerca del arte… pero definitivamente es nacido del ego.
Pingüino (Darío):
Quiéralo o no, el graffiti como cualquier otra forma de expresión refleja nuestra actualidad y lo peor es que es inconsciente. Uno no sale al la calle para querer ‘reflejar nuestra actualidad’, uno lo hace y ya. Entiendo q mucha gente lo vea como una vaina banal, pero yo creo que es más profundo que eso. Ya la obra de arte en sí no tiene tanta importancia como el lienzo y el lienzo es la ciudad. Yo pongo mi pingüino en lugares diferentes, pero es el mismo pingüino en contextos distintos.
El hecho de que alguien esté poniendo un pingüino por la ciudad ha creado un nexo con la ciudad, renueva la ciudad, le da vida a la pared.
Al final estoy imponiendo una imagen sin permiso y tengo el derecho de ponerlo. A mi me parece que sí es una forma de arte, que no todo el mundo entiende porque la mayoría de la gente lo ve como un acto vandálico.
Hase (Sergio):
Bueno el problema es ese: cuando comienzas a juzgar el arte. Mi abuela también dice que qué asco las pinturas de Picasso. Dice que son amorfos que ella no pone eso mal dibujado en su casa. Entonces es complicado porque bueno es como el arte entre gustos y colores.
Lo importante es hacerte famoso en la ciudad, llamar la atención y como que imponerte. Es rebeldía, demostrar que te cagas en la policía y en el sistema. Estás donde quieras, haces lo que te de la gana.
– ¿Vandálico + ego= sociópata?
Razauno (Max):
A algunos les gusta que los llamen vándalos pero el fin último es que todo el mundo vea lo que hacen.
45:
Quizá sí tiene un poco de eso, pero en verdad yo particularmente empecé a pintar para que la gente tuviese algo que ver mientras «esperaba el autobús».
Algunos consejos por el grafitero británico Banksy (tomado del sitio web http://www.banksy.co.uk/)
• Los grafiteros no son villanos. Los verdaderos villanos siempre me lo recuerdan: ellos consideran que alguien que irrumpe en un sitio y no roba nada y después deja el lugar con una pinta de metro y medio con su nombre es la idea más retardada que jamás han oído.
• La gente que ve una pintura al óleo admira el trazo del pincel y su sentido, el que ve un graffiti admira el uso de una cañería para acceder al lugar que se pintó.
• Los tiempos en que importaba ganar fama están pasados de moda. El trabajo artístico que se trata sólo de querer ser famoso, eso nunca te hará famoso. Cualquier fama es producto y consecuencia de hacer algo con sentido. No vas a un restaurante y pides una comida porque quieres mierda.
• ¿El graffiti es arte o vandalismo?
Esa palabra tiene muchas connotaciones negativas y es alienante, de manera que yo no uso la palabra “arte” para nada.
– O sea que tiene una «función social»… ¿y no es mejor ver a la “catira regional” en la parada de autobús?
45:
Obviamente esa imagen y esa estética es impuesta. Yo solamente espero darle la opción a la gente de ver ese veneno que les están vendiendo o mis dibujitos feos.
Para cada graffiti hay una valoración, unos porque son demasiado artísticos, otros porque son honestos, y otros porque son falsos, definitivamente la falsedad es parte de la ironía, y la ironía tiene mucho valor.
– ¿Y cuál es el valor de un graffiti?
Hase:
Hay dos movidas. Para los que hacen graffiti tradicional (hip-hop) se trata de tener presencia en la mayor cantidad de lugares posibles. Convertirse en king. Para los que hacen street art lo más importante es el concepto, la ubicación, la composición; es mas cuestión de intervenir el espacio y comunicar un mensaje. Es una movida tranquila. En realidad ambos bandos ni siquiera son muy amigos porque tienen una ideología aparte.
Pero a veces llega un momento en que lo importante no es ni siquiera la pieza en sí, sino ya es un peo de cuántos pacos pasaban por aquí, que cómo se subió pa’ allá, de qué tamaño es, de cómo le pega la luz. Todo eso que la gente normal ni se imagina.
Pingüino de Dario
Razauno:
El graffiti representa localidad. En Estados Unidos los chamos saben cuando un tag es de PHILLY o cuando es de LA o NY. Lo que pasa es que los chamos en Venezuela quieren hacer el estilo USA o Europeo. Nadie busca la identidad del país.
– ¿Qué hay con los graffitis donde lo más importante es el mensaje? ¿han pintado alguna declaración de amor?
Hase:
No, nunca declaración de amor, en todo caso dedicatoria es lo que se usa comúnmente, inclusive a tu panas que pintan contigo. Uno suele dedicar la pieza al que te acompaña, o a tu pana o a la jeva. La diferencia es que la vaina es una pieza,
no es un mensaje de amor… o sea lo que verás es una gran bomba con unas letricas que son dedicatoria, nunca verás una dedicatoria sola…
– ¿Cómo es ese asunto de los concursos de graffiti?
Hase:
Yo trabajé con la Alcaldía de Chacao como Dj y cuadré para que me cedieran el espacio para la primera expo de artistas de la calle en el Ateneo de Chacao. Ellos querían llegarle a los jóvenes y, bueno, era como el leguaje perfecto para el medio.
La primera competencia de graffiti que hicieron con la Alcaldía de Baruta fue porque me llamaron para ver como hacían para eliminar un pelo el “bombardeo” en el municipio. Yo recomendé la competencia y dejar una pared libre de por vida para todo el mundo.
Pingüino:
Eso es un show. Mata todo el punto del graffiti. Eso de los concursos es pura política.
– ¿Pero no pierde la emoción de lo anti-sistema? ¿es decir… ahora es legal?
Razauno:
Para mí es la evolución. Los que bombean solo quieren destruir y tagear… otros quieren tener una buena pared sea legal o ilegal… otros quieren exponer.
En Caracas ahora los grafiteros quieren exponer, muestran sus caras para las cámaras de televisión. Se toman fotos con Leopoldo López pero dicen al día siguiente que ellos son Bombers. Es muy bobo. ¡O te entregas a la farándula o te escondes pero las dos a la vez no!
– ¿Qué opinas de que se use el lenguaje del graffiti para otros medios?
Razauno:
Creo que eso pasa con cualquier tipo de expresión artística, más si está de moda y trata de capturar a los jóvenes. Desde unos años para acá se ve el graffiti en todo, ya hasta mi mamá sabe de graffiti y en parte es bueno. Siempre están los que odian que las cosas se vuelvan populares, pero creo que gracias a ello el mismo graffiti busca evolucionar y es ahí donde se pone interesante.
Ya no es solo pintar en la pared o hacer tags, o stencils, o afiches… hay artistas que han hecho trascender su trabajo y ahora lo proyectan en los edificios, o publican libros, o hacen exposiciones, o venden fuentes tipográficas que salen de la caligrafía de determinados grafiteros.
Hase:
Hay grandes empresas que usan el graffiti como recurso publicitario. Yo estoy en contra.
– ¿Qué piensan de los que dicen que el graffiti es una etapa?
Razauno:
No vale, para nada… es un modo de vida como lo es ser surfista, patinetero…. el que es graffitero de corazón no lo abandona….es como una actitud.
Yo no me considero grafitero, soy un diseñador influenciado por el graffitti… pinté varias veces pero no soy grafitero, no me considero uno. Amo el graffiti y forma parte de mi vida pero no me puedo llenar la boca diciendo que soy graffer. Lo más interesante para mi son las letras los tags…. es tipografía en su máxima expresión. Es como dominar el arte de la caligrafía.